Los insectos en otoño e invierno no nos abandonan. El verano es la más dura época, los mosquitos campan a sus anchas y las picaduras están a la orden del día. Con la llegada del otoño e invierno su presencia prácticamente desaparece pero otros insectos se mantienen activos y no es raro encontrarse con ellos. Los más frecuentes en los meses fríos son las hormigas, arañas, moscas, cucarachas y los “pececillos de plata”.
La vuelta de las lluvias y el consiguiente aumento de la humedad, junto con el calor de la calefacción son los factores que más favorecen su aparición. Pero tranquilo, hay formas para evitar su proliferación o directamente para acabar con su presencia.
CÓMO PREVENIRLOS
Control de la humedad: El ambiente preferido por estos insectos son los cálidos y húmedos, como los baños. Por eso es importante tratar de evitar goteras y humedades.
Limpieza: mantener los suelos libres de restos de comida y fregados es una de las medidas más eficaces para mantener a raya a los insectos de otoño e invierno.
Cierra grietas: Si detectas alguna grieta o pequeño orificio que puede servir de entrada para los insectos, trata de cerrarla o bloquearla cuanto antes.
CÓMO ACABAR CON ELLOS
Cuando la presencia de los insectos de otoño ya es evidente, es hora de pasar a la acción con los insecticidas o trampas para insectos. Casa Jardín te ofrece una amplia gama para tratarlos: